La artrosis u osteoartritis es una enfermedad degenerativa crónica de lenta progresión común en la edad avanzada que afecta a las articulaciones móviles del cuerpo caracterizadas por dolor articular, sensibilidad acentuada, rigidez, alteración en la movilidad, crepitaciones y derrame.

La artrosis u osteoartritis se genera a partir del daño acumulativo proveniente de lesiones microscópicas y macroscópicas en dichas articulaciones que activan una respuesta de reparación mal adaptada que incluye la activación de vías proinflamatorias del sistema inmunitario innato.

El trastorno se manifiesta primero a nivel molecular y celular (metabolismo anormal de los tejidos de la articulación) seguido de alteraciones anatómicas o fisiológicas (degradación y pérdida del cartílago, remodelación del hueso, formación de osteofitos, inflamación sinovial, esclerosis y engrosamiento del hueso subcondral y pérdida de la función articular normal). El compromiso de la cadera y las rodillas son una causa común de discapacidad.

La artrosis u osteoartritis es la enfermedad reumática más frecuente, especialmente entre personas de edad avanzada.

Se presenta de forma prematura en personas con enfermedades genéticas que afectan al tejido conectivo, como el síndrome de Ehlers-Danlos y el síndrome de hiperlaxitud articular.

En la artrosis, la superficie del cartílago se rompe y se desgasta, lo que provoca que los huesos se muevan el uno contra el otro y genera fricción, dolor, hinchazón y pérdida de movimiento en la articulación. Con el tiempo, la articulación llega a perder su forma original, y pueden crecer en ella espolones. Además, pueden desprenderse trozos de hueso y de cartílago y flotar dentro del espacio de la articulación (ratones articulares), lo que genera más dolor y daño.

La artrosis en los dedos al parecer se presenta en algunas familias y no en otras, por lo que se piensa que podría ser hereditaria. Se ha observado que afecta más a mujeres que a hombres, especialmente después de la menopausia. Pueden aparecer pequeños nódulos de huesos en las articulaciones de los dedos. Nódulos de Heberden, en las articulaciones interfalángicas distales de las manos, o nódulos de Bouchard si están en la parte proximal. Los dedos se pueden hinchar, ponerse rígidos y torcerse. Los dedos pulgares de las manos también pueden resultar afectados (rizartrosis del pulgar).

Las rodillas son las articulaciones sobre las que se carga la mayor parte del peso del cuerpo (junto con los tobillos, pero estos se mueven mucho menos que las rodillas), así que las expone a que sean mayormente afectadas por la artrosis.

La prevalencia de artrosis-cervical y de artrosis-lumbar son más frecuentes en mujeres y a mayor edad, así como en personas con niveles de estudios bajos y obesidad.

  • Edad: personas adultas sobre los 60 años.
  • Sexo: Igual para ambos sexos, pero en las mujeres se presenta a edades más tempranas (45 años).
  • Mujeres: Predomina en las rodillas y en las articulaciones interfalángicas (manos).
  • Hombres: Predomina en la cadera.
  • Obesidad: Cuadruplica el riesgo si la persona se encuentra por encima del IMC considerado normal.

Hay tres tipos etiológicos integrando la artrosis primaria:

  1. La artrosis tipo I, de causa genética.
  2. La artrosis tipo II, hormono dependiente (postmenopáusica).
  3. La artrosis tipo III, relacionada con la edad.

El objetivo de los tratamientos se ha centrado en erradicar en lo posible el dolor y otras molestias asociadas a esta patología mediante la administración de analgésicos y antiinflamatorios.

 

https://www.msdmanuals.com/es/hogar/trastornos-de-los-huesos,-articulaciones-y-m%C3%BAsculos/enfermedadesarticulares/artrosis#:~:text=La%20artrosis%20es%20un%20trastorno,muy%20frecuente%20con%20el%20envejecimiento.https://es.wikipedia.org/wiki/Artrosis