Una carta de investigación publicada esta semana describe el caso de una mujer en China que extendió COVID-19 a cinco personas sin mostrar ningún síntoma.
Aunque los esfuerzos internacionales para frenar el brote de coronavirus están en pleno apogeo, algunos ven este hallazgo reciente como motivo de preocupación.
Hasta la fecha, la gran mayoría de los casos han ocurrido en China, pero el virus ahora se ha extendido a otros 29 países.
Los científicos han demostrado que el nuevo virus, denominado SARS-CoV-2, puede transmitirse de humano a humano. Los estudios también han demostrado que algunas personas pueden estar infectadas por el virus pero muestran pocos o ningún síntoma.
El artículo reciente, publicado en JAMA, es el primero en describir un portador asintomático que transmite el virus a otros.
¿Qué significa esto?
Una carta publicada en The New England Journal of Medicine el 30 de enero describió un caso similar. Informó que una mujer de Shanghai, que no experimentó síntomas, había transmitido la infección a un hombre alemán.
Los autores de la carta escriben que “El hecho de que las personas asintomáticas sean fuentes potenciales de infección [SARS-CoV-2] puede justificar una reevaluación de la dinámica de transmisión del brote actual”.
Sin embargo, resultó que la mujer había experimentado síntomas leves, como dolor muscular y fatiga. Los autores no habían logrado hablar directamente con la mujer antes de que se publicara el material.
La información sobre este brote se publica de forma rápida y exhaustiva; Durante una epidemia, todos se centran en llevar los datos al dominio público.
En una entrevista con Science, el profesor Marc Lipsitch, epidemiólogo de Harvard T.H. Chan School of Public Health, en Boston, MA, explica cómo estas situaciones pueden cambiar la forma en que se compila y publica la evidencia científica:
“Creo que la revisión por pares es más ligera en medio de una epidemia que a velocidad normal, y también la calidad de los datos que ingresan en los documentos es necesariamente más incierta”.
En general, el estudio de caso actual es convincente, pero se necesita más investigación.
También vale la pena señalar que los portadores asintomáticos no estornudan ni tosen, que son algunas de las principales formas en que el virus se propaga. Debido a esto, no está claro cuánto papel podrían desempeñar estos individuos en la transmisión del SARS-CoV-2.