Actualmente es una realidad monitorizar la frecuencia cardíaca sin sin que afecte la rutina diaria de las personas. Los sensores corporales irán ganando espacio y confiabilidad en los próximos años.
Anteriormente se empleaban instrumentos con indicadores visuales que nos permitían conocer el pulso, la temperatura corporal apropiada, entre otros.
En el presente, mientras más personas tienden a envejecer surge la necesidad de nuevas tecnologías móviles para la salud para ejercer un monitoreo sin obstaculizar las costumbres de las personas.
Los sensores pueden ser muy pequeños pueden generar voltajes por sí mismos. Existen muchos tipos de sensores, algunos pueden medir temperaturas y se puede acoplar en la piel o en una fisura estacionaria.
Un sensor óseo pequeño, poco invasivo, podría revelar traumatismo físico en tiempo real lo que pudiera evitar lesiones peligrosa. Estos sensores por su característica tan pequeña se pueden introducir en tejidos, vendajes o vestimenta Es de suma importancia la creación de estos sensores para la salud física.
Estas y otras innovaciones también son posibles en Pharmamedic.