El micoplasma genital es una bacteria de transmisión sexual que produce uretritis y cervicitis. El micoplasma genital es una bacteria que pertenece a un género de bacterias llamadas Mycoplasma. Estas bacterias son peculiares porque no tienen pared celular. El nombre procede del griego mykes que significa hongo, y plasma (formado), porque al principio se pensaba que tenían un crecimiento similar al de los hongos.

Esta infección no es fácil de diagnosticar, sus síntomas no son distinguibles de las uretritis o cervicitis producidas por otras bacterias de transmisión sexual, y a menudo es posible que se trate de forma empírica sin llegar a saber de su presencia. El micoplasma genital es dificilísimo de cultivar. Si se consigue (en laboratorios muy especializados), sus colonias tienen aspecto de huevo frito. Además, no se puede apreciar en las muestras clínicas teñidas al microscopio porque no tiene pared celular. Esto dificulta el diagnóstico de las infecciones por esta bacteria. Al microscopio electrónico tiene un aspecto de botella o frasco en forma de cono. Es una bacteria muy pequeña, de 0.2 a 0.8 micrómetros.

En los hombres,  Los síntomas de la uretritis son las molestias y el escozor al orinar, el picor de la uretra y la aparición de una secreción mucopurulenta por la uretra. Se puede asociar a balanitis (inflamación del glande) y postitis (inflamación del prepucio).

En las mujeres, la inflamación del cuello del útero (cervicitis) es la presentación más frecuente de esta infección. Los síntomas que pueden aparecer no son específicos del micoplasma: picor y aumento del flujo vaginal. Las molestias al orinar y el dolor en la zona de la pelvis son otros síntomas asociados a esta bacteria. En ocasiones puede provocar un cuadro más grave; la enfermedad inflamatoria pélvica. En estos casos la mujer afectada tiene dolor en el vientre bajo, aunque se puede extender al resto del abdomen. El dolor puede ser muy intenso. Es frecuente, además, la aparición de fiebre. El flujo vaginal aumentado puede acompañarse de un sangrado vaginal no muy abundante.

Los factores de riesgo de la infección por Mycoplasma genitalium son la juventud temprana (personas menores de 22 años), el tabaquismo, el haber mantenido relaciones sexuales de forma reciente y la promiscuidad sexual, entendida como haber tenido dos o más parejas sexuales en el último año. En las mujeres la vaginosis bacteriana y la infección por VIH también son factores de riesgo de infección por el micoplasma genital.

Las relaciones sexuales dentro de una pareja monógama, y el uso de preservativo en el caso de parejas sexuales esporádicas y de historial sanitario y sexual desconocido, son la mejor forma de evitar esta infección y otras de transmisión sexual.

El tratamiento de la infección por el micoplasma genital requiere del uso de antibióticos.

La única forma de evitar la infección por esta bacteria es la abstinencia sexual. Como esta alternativa no parece muy viable para la mayoría de las personas, la mejor opción es tener una pareja estable sana monógama, y no mantener relaciones con terceras personas.

En cualquier otra relación sexual se debe utilizar el preservativo, incluso para el sexo oral (para evitar también otras infecciones de transmisión sexual, de transmisión genital -oral, o fecal–oral).

Cuida siempre de tu salud con un servicio único y eficiente. Visita Pharmamedic.